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martes, 29 de marzo de 2011

Hace 25 años se modernizó San Cristóbal

Cuando fue inagurado en Centro Civico, que hoy esta en ruinas
Hace 25 años se modernizó San Cristóbal
La primera etapa del Centro Cívico fue inaugurada el 31 de marzo de 1986, como regalo a la ciudad de San Cristóbal en sus 425 años de fundada, y así se encuentra.
( José Luis Guerrero S. – Diario La Nación 29/03/2011 )

La modernización del casco central de la ciudad de San Cristóbal, como lo llamaron las autoridades municipales de la época, comenzó hace 25 años con la inauguración de las dos torres del Centro Cívico.

Era la primera fase de un ambicioso proyecto arquitectónico, previsto a ser desarrollado en nueve manzanas de la villa de Juan Maldonado, pero por la falta de recursos económicos todo ha quedado en el papel.

El 31 de marzo de 1986 la ciudad estuvo de fiesta. Centenares de sancristobalenses se reunieron en la Plaza Bolívar para presenciar el acto cultural programado por las autoridades, para luego recorrer las modernas instalaciones, acompañados por el expresidente Carlos Andrés Pérez, a quien se le debe el inicio de la obra, al aportar recursos económicos.

Monseñor Marco Tulio Ramírez Roa bendijo las instalaciones, y al arquitecto Henry Matheus, diseñador de la obra y presidente de la Compañía Centro Cívico, la municipalidad le agradeció su trabajo con el Emblema de Oro de la Ciudad.

Para muchos, el complejo arquitectónico, parte del Plan Maestro Central, como escribió hace 25 años en Diario La Nación la periodista Mireya Vivas, "es un proyecto ambicioso, cuya cristalización queda a voluntad de las decisiones de las autoridades de turno".

Las personas subieron por primera vez a unas escaleras eléctricas, disfrutaron de la fuente de agua cristalina, que con su brisa refrescaba al peatón; caminaron por los amplios pasillos, observaron las modernas vitrinas de cristal de los locales comerciales ya instalados, y quienes tenían vehículo, utilizaron el primer estacionamiento subterráneo de San Cristóbal.

Aquella obra emblemática que marcó el final de la etapa de las casas viejas, de las calles de piedra, y el comienzo de una transformación urbana, de la ciudad moderna, ha sido una de las más costosas para la ciudad. Se construyó en plazo de 10 años. Fue el comienzo de la remodelación del centro, que, como escribió Vivas, "a su alrededor hay más ilusiones y sueños plasmados".

25 años después, a la fecha no se ha ejecutado otra obra urbanística de aquel complejo arquitectónico y, para muchos vecinos, el edificio se ha convertido en un punto gris, por la cantidad de problemas que allí se registran y el descuido de la edificación.

Para complemento, el 2 de diciembre de 2006 un incendio destruyó la torre B, en cuyos espacios funcionaban las oficinas del Consejo Legislativo y de la Contraloría del estado Táchira. Todo fue destruido por el fuego. Transcurridos cuatro años, tres meses, del siniestro, las autoridades competentes no la han recuperado.

Hace un año, aproximadamente, hubo remoción de los escombros y se aseguró el inicio de los trabajos de construcción, pero sorpresivamente éstos fueron paralizados. En esa oportunidad se aseguró que la torre sería utilizada en actividades de formación educativa.

Transformación congelada

El 3 de abril de 1986, Manuel Castro Contreras, presidente del partido Copei, declaró a este medio de comunicación impreso que "ahora es cuando comienza el Centro Cívico. Queremos que se transforme en el gran centro del desarrollo urbanístico de la zona metropolitana, sin egoísmos, sin sectarismos... junto con las avenidas del Centro, conforman la proyección de la ciudad por la San Cristóbal del 2000".

La transformación no se concretó y quienes en esa época se opusieron al proyecto, como el cronista de la ciudad, J. J. Villamizar Molina, son testigos del descuido de la edificación y como sus espacios son subutilizados, pasillos tomados por vendedores ambulantes, un hall, ideado para la presentación de agrupaciones culturales y exposiciones artesanales, ocupado por vendedores.

Desde hace años, la fuente de agua está dañada, las escaleras eléctricas son sólo historia, pocos locales funcionan en el llamado sótano comercial, el hall está ocupado, hay daños en la planta física, los espacios abiertos para la gente están cerrados con rejas de hierro por la inseguridad, la modernidad de hace 25 años es hoy día solo historia.

Julio Matías, presidente de la Compañía Anónima Centro Cívico, lamenta que la edificación, que cumple 25 años, "esté tan deteriorada, tan descuidada. Es una pena para toda la cuidad". Él considera que es hora que las autoridades en general y la ciudadanía tomen una decisión para su rescate.

Las dos torres son administradas por una junta de condominio, directiva que en entrevistas públicas asegura ha tratado de recuperar la edificación, pero no cuentan con los recursos necesarios.

25 años después, no todo el pueblo entra al Centro Cívico. No se trata de una discriminación política, de clases sociales, ni religiosa. Las personas se han alejado de las dos torres por la inseguridad que en ellas reina, por la cantidad de vendedores ambulantes que han ocupado todos los espacios abiertos, diseñados para el disfrute del paisaje y del entorno urbano.

Es un clamor general el reordenamiento de la edificación. La necesidad de conformar un equipo de trabajo para presentar propuestas que permitan utilizar todos sus espacios, rescatar los pasillos de la planta baja, reordenar las ventas en los kioscos de sus alrededores, recuperar los espacios del hall y darle vida a los espacios de la fuente de agua, cuya reconstrucción exige la inversión de mucho dinero.

Aquel día de júbilo es sólo historia. La proyección de la ciudad, hace 25 años, se congeló y el Plan Maestro Central reposa en los espacios de la Compañía Centro Cívico, donde los planos y las maquetas del complejo en general han sido guardados.

Historiadores de Colombia y Venezuela conmemoran los 450 años de la Ciudad

30 ponencias y 12 conferencias, en cinco mesas de trabajo

Historiadores e investigadores de Colombia y Venezuela se reúnen en San Cristóbal para conmemorar los 450 años de la fundación de la villa de Juan Maldonado, en el marco del Congreso Binacional de Historia, que fue instalado en el auditorio de la Universidad Católica, por parte de Pascual Mora, presidente de la Academia de Historia del Táchira.

Los participantes debatirán "sobre el estado del arte de la historia, los grandes hechos y procesos históricos del tiempo presente, y las demandas de otros sujetos culturales, económicos, políticos y sociales, que intervienen en la escritura de la historia", escribió Mora en el programa del evento.

Todos ellos van a estudiar cómo ejercer el oficio de historiador en el siglo XXI, cómo abordar las nuevas formas de trabajar con fuentes, teorías y la cultura de las redes; cómo llegar con nuevas tecnologías al público lector y espectador.

Lo harán mediante la presentación de 30 ponencias y 12 conferencias de destacados académicos de ambos países, en cinco mesas de trabajo: Historia comparada Colombia-Venezuela; redes académicas, historiografía y fuentes; la historia de San Cristóbal, tachiraneidad, sus hombres y sus obras; San Cristóbal de la modernidad a la postmodernidad.

En sus palabras de instalación del Congreso, Pascual Moral dio la bienvenida a las delegaciones colombianas y venezolanas. Reiteró "que se debe superar el nivel aldeano de nuestras investigaciones que todavía viven ancladas en la historia cronológica y episódica, para insertarnos con criterio científico reconocido en la cultura global y colectiva, en un proceso de gestación y ejercicio de la conciencia y autoconciencia del tiempo presente..."

Destacó que San Cristóbal, en sus 450 años, sigue siendo una ciudad que nace.

Un libro para la Ciudad
Como un regalo a la ciudad cumpleañera, el Dr. Javier Ocampo López, presidente de la Academia Boyacense de Historia, bautizó su libro "Los orígenes fundacionales de la villa de San Cristóbal y el antiguo corregimiento de Tunja", impreso por el Fondo Editorial Simón Rodríguez, de la Lotería del Táchira.

"Es un texto interesante que viene a llenar un vacío en la historiografía de la historia comparada colombo-venezolana, narrado en doce capítulos. Se convierte en el aporte más significativo por el aniversario de la ciudad", dijo Mora.

Sobre el libro, el doctor Carlos Barrera Martínez, de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, Tunja, y miembro de la Academia Boyacense de Historia, escribió "... en una larga duración y que en una observación paciente y detenida a la Villa de San Cristóbal analiza las capas sucesivas, sus elementos y vestigios sobre el espacio, la historia y los hombres, las cosas y las tradiciones, y que la historia ahora desentraña bajo la auscultación del maestro Javier Ocampo López la fundación hispánica de San Cristóbal, el 31 de marzo de 1561..."

"Escribe el autor sobre la vinculación jurídico-política de la nueva villa a la Provincia de Tunja, los imaginarios y las representaciones de la cultura de las letras y las artes. Tiene la bondad su trabajo de mostrar filones históricos desde las fuentes primarias de gran utilidad, para adentrarse en la investigación histórica de esta parte de Venezuela, y un catálogo de fuentes secundarias que enriquecen esta investigación y que serán un faro para todos los historiadores..."

Otros aportes a la Ciudad
En medio de la programación del evento, aprovechando la visita de los académicos de ambos países, en el Museo Pedagógico Dr. Temístocles Salazar, de la Universidad de los Andes-Táchira, fue develada la fotografía del maestro neogranadino Dámaso Zapata, quien ejerció el magisterio en la ciudad de San Cristóbal en 1856.

La actividad estuvo enmarcada dentro del acto homenaje a los maestros de San Cristóbal en el siglo XX. Igualmente fue inaugurada la sala del Archivo Digital del Táchira, Monseñor Carlos Sánchez Espejo, en la planta baja de la Universidad de los Andes, que contará con el apoyo de las autoridades del Gobierno regional, decreto 355.

La iniciativa de los integrantes del Grupo de Historia de la Educación, Hedure, que coordina Pascual Mora García, plantea que "los libros, y en general los documentos antiguos, que por su valor histórico y características se constituyen en patrimonio nacional, usualmente no son puestos al servicio del público, por el peligro de deterioro al manipularlos y es la digitalización una opción para la difusión de estos contenidos". (JLG)

El Obelisco se ha convertido en el monumento que identifica la ciudad de San Cristóbal.


Para el historiador Samir Sánchez, el Obelisco se ha convertido en el monumento emblemático de San Cristóbal "Es un esqueleto el casco colonial de la ciudad"


 (José Luis Guerrero S. – Diario La Nación 28/03/2011)

Son pocas las edificaciones históricas de la ciudad de San Cristóbal que se conservan en pie. Las existentes están dispersas en la cuadrícula del Centro, espacios llenos de historia, hoy calles y carreras que habitaron los indios Chinatos y de otras tribus, que luego recorrió Juan Maldonado y los españoles conquistadores.
Sólo se conserva parte del trazado inicial de la ciudad hecho el 31 de marzo de 1.561 y durante los días siguientes por el capitán español venido de Pamplona. El demarcó la plaza mayor, la cárcel, el cabildo y la iglesia en el sector La Catedral, entre las carreras 1 y 4, calles 3 y 6.

Sobresale la iglesia, construida en el mismo lugar donde se fijó hace 450 años, pero no hay edificaciones de la colonia. Muchas fueron destruidas por los terremotos que azotaron la ciudad y otras por la mano del hombre para dar paso a construcciones modernas. No hay calles de piedras o huellas tangibles de aquellos años.

"Es el sector Catedral un esqueleto del pasado. Está descuidado al extremo porque los sancristobalenses no tenemos memoria. No ha habido una educación para conocer el pasado, por eso no lo valoramos y solo lo apreciamos cuando lo perdemos", dice el historiador Samir Sánchez.

Eso se debe, según su visión, a que como no se conocen los acontecimientos que sucedieron en la plaza mayor, en el Convento de los Agustinos, que importancia tiene la Cuesta de Filisco para la ciudad, sus características e importancia en la historia y lo que cada lugar representa, no se les presta atención.

Para muchas personas son un poco de construcciones viejas que se deben derribar para dar paso a los desarrollos urbanísticos modernos, grandes edificios y centros comerciales.

"Cuando se cree esa cultura sobre el valor histórico de la ciudad, todo va a cambiar. Este lugar en referencia es importante porque es allí donde nació la ciudad, está el génesis de San Cristóbal y nos corresponde conservar lo que aún está de pie. Porque por sus calles se escribió la historia de la Villa, su pasado y su presente", expresa.

Muchos turistas llegan a la ciudad y quieren conocer parte de su historia y es poco lo que se puede mostrar. Además, no se cuenta con el material impreso o digitalizado para contar la riqueza del pasado que éstas esconden en sus espacios.

Contrario ocurre en Europa y en otros países de América como México, Ecuador, Perú y Bolivia, donde el turista se interesa por conocer las edificaciones históricas, visitas que generan divisas.

Emblema de la ciudad

A su juicio, no se ha encontrado un símbolo emblemático que identifique a San Cristóbal.

Hay edificaciones y elementos dispersos en el Centro, como la Catedral, el Edificio Nacional, la plaza Juan Maldonado, el Salón de Lectura, la Casa Steinvorth, el Palacio de Los Leones, la Casa del Museo de Artes Visuales y del Espacio, todos con un valor patrimonial y un legado histórico que todos debemos conocer.

Si de construcciones religiosas se trata, la ciudad cuenta con hermosos templos como las iglesias San José, El Ángel y Perpetuo Socorro, cada una con características arquitectónicas particulares en su fachada y en las naves centrales.

En el otro extremo de la ciudad se ubican iconos como el Obelisco que la colonia italiana regaló a la ciudad de San Cristóbal en 1.968; la plaza de toros de Pueblo Nuevo, el Hotel El Tamá; también destaca la estructura colgante del puente Libertador, que unió a los municipios Cárdenas y San Cristóbal durante muchos años. Para otros el Centro Cívico es un lugar emblemático.

Todos representan a la ciudad y son mostrados con orgullo a los visitantes, quienes conservan su imagen en una fotografía personal. Para los amantes de la naturaleza, la historia natural del Parque Nacional Chorro del Indio debe ser considerada.

Samir Sánchez precisa que el Obelisco ya se identifica como algo propio de San Cristóbal. Incluso recientemente la municipalidad ideó la entrega de una réplica a las organizaciones musicales de la región en medio de un show musical, que se asegura, será celebrado todos los años.

El historiador sugiere que las autoridades municipales deben buscar un elemento que sea referencia en todos lados del país, como ocurre con el puente sobre el Lago de Maracaibo, en el estado Zulia, o las torres del Silencio que durante años identificaron a Caracas, hoy sustituidas por las torres del Parque Central.

El Obelisco de la avenida 19 de Abril es una obra escultórica de grandes dimensiones, regalo de la colonia italiana a la ciudad de San Cristóbal en 1.968. Dedicado al genovés Cristóbal Colón y a todos los habitantes de esta tierra de gracia por los lazos de cooperación entre Italia y Venezuela.

"Yo considero que hubo un tiempo que la plaza de toros o el hotel de ferias El Tamá nos identificaban, pero han decaído y las nuevas generaciones no lo sienten como suyos. El primero por las manifestaciones en contra de la muerte de los toros y el segundo, porque desde hace muchos años permanece cerrado", señala.

A su criterio, es una tarea pendiente de las autoridades y de la ciudadanía en general, el asociar un elemento de interés colectivo con la ciudad.


Se necesita una junta de veedores para proteger el patrimonio histórico

La ciudad de San Cristóbal no ha tenido un grupo de personas agrupadas para defender las construcciones donde se ha escrito la historia local con repercusión nacional e internacional. A lo largo de los años, hay defensores particulares del patrimonio cultural, pero sus reclamos y puntos de vista no han sido escuchados.

Quienes han ocupado puestos de poder en los gobiernos municipal, regional y nacional han tomado decisiones y viejas edificaciones, de mucho valor histórico, han sido demolidas para dar paso a avenidas o nuevas construcciones.

"No tenemos esa junta de veedores o de conservación del patrimonio, como sí existe en Pamplona y otras ciudades. Vaya usted a modificar algo histórico del centro de una ciudad colombiana o de cualquier otro lugar, en Europa por ejemplo, y no puede hacerlo, porque hay una veeduría, una junta que valora el pasado y argumenta sus posiciones con planteamientos lógicos sobre la historia", explica Luis Hernández.

Agrega que en San Cristóbal "eso nunca ha existido, porque a nosotros no nos gusta valorar el pasado. Por eso fueron derrumbados el Palacio de Gobierno de Cipriano Castro, el Teatro Garbiras y poco faltó para que demolieran la edificación del Salón de Lectura, por sólo nombrar tres ejemplos importantes".

En su reflexión sobre los 450 años de la fundación de Villa, expresa que la ciudad ha sido desmembrada: Sacaron el mercado de la plaza mayor, corrieron el palacio de Gobierno para otro lugar, luego se llevan la plaza Bolívar, "por eso el casco colonial, como tal, no existe".

"A la ciudad le hace falta esta junta y también un sistema de capacitación de cultura ciudadana, que el ciudadano de San Cristóbal se sienta identificado con sus espacios, aprenda a vivir en ella. Hay hechos muy graves como el irrespeto que ocurre a diario en la plaza Bolívar, son cosas que nadie debe aceptar, pero se traduce todo en falta de autoridad municipal y conciencia ciudadana", señala el historiador.

Otra fuera la historia si la junta se hubiera instalado. Se tendría otra connotación de la ciudad. Para él, el sitio emblemático de San Cristóbal, que la identifica, es el lugar de su fundación, la Plaza Juan Maldonado y la Catedral, donde es necesario un plan de acción local muy concreto para recuperarlo y mostrarlo al visitante.

Instituto de Patrimonio Cultural

Por decisión del Gobierno nacional, el ministerio del poder popular para la Cultura dictó la providencia administrativa 012/05, en Caracas el 30 de junio de 2.005, para "salvaguardar las manifestaciones culturales" que integran "todas las manifestaciones culturales tangibles e intangibles inscritas en el marco del I Censo del Patrimonio Cultural venezolano".

El artículo 8 de la providencia señala que son bienes materiales tangibles los centros históricos englobados dentro de una poligonal determinada, barrios, urbanizaciones, calles, avenidas, plazas y parques, monumentos, edificaciones, estatuaria e hitos urbanos, ruinas y sitios arqueológicos o paleontológicos, históricos, conmemorativos. Su tarea es defender lo que queda en pie.

Una iniciativa del Gobierno nacional ante la indiferencia de otros gobernantes.



Sitios Históricos de San Cristóbal

Fachada del Hospital Vargas

(Diario La Nación 28/03/2011)

El Hospital Vargas comenzó sus funciones el 19 de diciembre de 1.927 en sustitución del anterior centro asistencial. Hasta el año 1.958 sirvió de centro asistencial a nuestra población debido al surgimiento del Hospital Central en La Concordia.

De la estructura sólo se conserva su fachada, frente al parque Ríos Reyna, por otros llamado de Los Enanitos. Es un frontis de dos elevaciones a manera de torres, cada una con campanario en cuya cúspide hay dos águilas alzando vuelo. Al centro, la figura de una mujer, un ángel, en medio de hermosos detalles arquitectónicos que dan vida a la puerta de madera.

Esta fachada era el ingreso a la capilla del Hospital, espacio religioso que funcionó como un salón de reuniones hasta principios de la década de los 80.

Nota: Textos tomados del Catálogo patrimonio cultural venezolano. Municipio San Cristóbal. 2004-2007. Ministerio del Poder Popular para la Cultura.

Puente Libertador

El puente Libertador, sobre las aguas del río Torbes, es una estructura metálica colgante inaugurada el 17 de diciembre de 1.930 en ocasión del centenario de la muerte del Libertador Simón Bolívar. Une a los municipios Cárdenas y San Cristóbal y durante muchos años fue un importante medio de comunicación terrestre entre la zona norte del Táchira y el resto del país.

Representa una etapa importante en la evolución tecnológica nacional y regional. Fue diseñado por el mismo grupo que construyó la torre Eiffel en París, Francia. Es una obra de gran belleza arquitectónica en medio del paisaje donde se encuentra.
La estructura de la edificación es de puente colgante, armada en dos torres a través de las cuales pasan los cables que sostienen el eje central. Según gaceta oficial 31.611 del año 1.978, fue declarado Monumento Histórico Nacional.

Plaza Monumental

En San Cristóbal, al igual que en otras ciudades de América hispana, la corrida de toros se produjo como parte de las fiestas pueblerinas para luego pasar a ser parte importante de las grandes celebraciones patronales.
Debido a la consolidación de la Feria Internacional de San Sebastián en 1.965, se le hizo necesario a la ciudad un lugar donde desarrollar las actividades taurinas a gran escala.

El proyecto estuvo a cargo del arquitecto Santos Castillo, en 1.966. La obra fue inaugurada el 18 de enero de 1.967. La edificación refleja el estilo internacional donde es el uso el que determina la forma. Tiene una capacidad para 17.300 personas distribuidas en dos anillos generales, el primero con 17 gradas y el segundo con 10. En sus espacios internos están los toriles, las salas de juntas y la capilla taurina.

Salón de Lectura

La Sociedad Salón de Lectura Ateneo del Táchira, es un edificio de construcción neocolonial diseñado por el arquitecto Luis Eduardo Chataing. Fue construido durante los gobiernos de Juan Vicente Gómez y Eleazar López Contreras. Su inauguración fue en 1.939.

Está ubicado en la calle 9, esquina de la carrera 6, en pleno casco central de la ciudad de San Cristóbal.

El edificio consta de dos plantas, en la primera está el auditorio o teatro con capacidad para 300 personas, posee un balcón, camerinos, piso de granito y escenario de madera por donde han pasado artistas de reconocida proyección nacional e internacional. Cuenta con una galería, un café, una biblioteca, amplias áreas para cursos de dibujo y pintura, además de ser sede de manifestaciones culturales de la región.

Ambas plantas se comunican por unas escaleras de concreto; además, posee un patio central descubierto, de ladrillos, en donde se halla el busto de Abel Santos, quien fue presidente de la institución, y otro de Pío Gil.

"Poblar una villeta"

Juan Maldonado llegó el 31 de marzo de 1.561
"Poblar una villeta"

Juan Maldonado viajó desde Pamplona, en el Nuevo Reino de Granada, hoy Colombia, y fundó la ciudad el 31 de marzo de 1.561.
( José Luis Guerrero S. Diario La Nación 27/03/2011)

El dos de enero de 1.560, el Procurador de Pamplona - fundada el primero de noviembre de 1.549 -, Francisco Sánchez, solicitó a los integrantes del Cabildo de esa ciudad, la necesidad de "hacer y poblar una villeta de cristianos para asegurar el camino de Mérida y que dichos indios estén en paz y vengan al conocimiento de la fe cristiana".

Las autoridades de la época discutieron las fortalezas que varios expedicionarios españoles habían visualizado entre Pamplona, en el Nuevo Reino de Granada - Colombia - y Mérida, fundada sin orden real el 9 de octubre de 1.558 por el capitán Juan Rodríguez Suárez. Eran tiempos de la conquista española, de la lucha con el indígena que poblaba los Andes venezolanos.

Fue Rodríguez Suárez quien al llegar al sitio donde hoy está Zorca, el 25 de julio de 1.558, quedó impresionado por la belleza natural del lugar. Lo llamó valle de Santiago en honor a un pescador, uno de los doce apóstoles que acompañaron a Jesús en Jerusalén.

Antes, Alonso Pérez de Toloza bautizó esta zona como el pueblo de las Auyamas, por la abundancia de este fruto en el camino recorrido.

El historiador Samir Sánchez escribió en el libro "San Cristóbal Urbs Quadrata" que fueron cuatro las necesidades más apremiantes de los capitulares y vecinos de Pamplona para fundar el poblado: económicos, comunicacionales, jurisdiccionales y jurídicos.

Ellos planificaron que el factor económico se alcanzaba con la explotación de los indígenas en todas las labores mediante la repartición de éstos entre los fundadores, que asumían la encomienda; es decir, su alimentación, vestido y cuidado. Problema éste superado con el uso de la fuerza para la búsqueda de oro, plata o de cualquier otra riqueza natural en las llamadas por ellos “nuevas tierras”.
El factor comunicacional propuesto por el Procurador de Pamplona como la principal necesidad que llevó a fundar una villa, con el transcurrir de cuatro siglos y medio, está consolidado.

Según los historiadores, el factor jurisdiccional considerado para 1.560, representó "salir" adelante en la fundación de la Villa antes de que el Cabildo de Mérida lo hiciera; y el jurídico enmarcado en la conquista y ocupación del territorio para poblarlo y aprovecharse de sus recursos naturales.

Es así como Juan Maldonado y Ordóñez de Villaquirán funda la ciudad de San Cristóbal el lunes santo 31 de marzo de 1.561, en lo alto de la meseta donde hoy día está la Catedral y la Plaza que lleva su nombre.

San Cristóbal aún posee muchas fortalezas

No todos sus habitantes ejercen la ciudadanía para ayudar a salvarla
San Cristóbal aún posee muchas fortalezas

La ciudad no tiene edificaciones de la colonia. Las pocas casonas que permanecen en pie fueron reconstruidas a partir de 1.875.

( José Luis Guerrero S. Diario La Nación 27/03/2011)

La ciudad de San Cristóbal se ha consolidado. No hay cifras concretas, pero se estima sean más de 600 mil personas las que día a día comparten sus espacios.

Todos ellos se unen diariamente en un mismo territorio. Disfrutan de sus fortalezas, critican sus debilidades para que sean mejoradas, no sólo por las autoridades municipales de turno, sino por todas las personas que ocupan sus calles, sus parques, sus mercados, sus edificaciones. Las que van y vienen a trabajar, a estudiar, por diligencias personales o a dar un paseo.

A sus 450 años de fundada, San Cristóbal necesita resurgir. Para ello se hace necesario crear un plan para rehabilitarla y cambiar el esquema de una ciudad no planificada, donde haya participación de todos los sectores que comparten sus espacios. Este es el planteamiento del historiador Samir Sánchez, secretario de la Universidad Católica del Táchira.

"Hoy podemos definir que la ciudad está como anárquica y esta generación debe pensar a largo plazo, que con el correr de otros 50 años hagamos una San Cristóbal planificada, con normativas escritas en estos tiempos que se cumplan y no se traten sólo de letra sobre papeles... Es rehabilitar la ciudad que todos queremos, con la que soñamos y que aún ha sido imposible alcanzar", expresa.

A su criterio, se deben aprovechar todas las fortalezas de la ciudad; su ubicación, su clima, su gente, para hacerla más humana, hecha para el bienestar de las personas... "Que cualquier habitante pueda caminar hacia el Centro u otro lugar de la ciudad y disfrute ese recorrido. No debemos pensar sólo en el cemento ni en los carros, como ha sucedido hasta ahora, sino aprovechar su entorno natural y sembrar más árboles".

Pero también agrega, es importante imponer las normas, aplicarlas para frenar el comportamiento anárquico de muchos de sus hijos y de sus visitantes, quienes no tienen conciencia ciudadana para habitarla y vivirla al actuar de manera grosera y desenfrenada.

Opinión similar comparte el también historiador Luis Hernández, presidente del Ateneo del Táchira, quien considera muy importante trabajar sobre la cultura ciudadana y el adecuado uso de los espacios públicos, despertar el amor de la gente por la ciudad, que la sienta suya, para aprender a valorarla y la cuide.

Precisa que el error que hoy día pagamos todos es porque no se ha enseñado a amar a San Cristóbal. Esta es la razón de la anarquía de muchos de sus habitantes y de las personas que vienen de otros municipios a compartir sus espacios.

Sostiene que los males de la actual ciudad son consecuencia de sus debilidades, tal es el caso del caos del tráfico de vehículos, la violencia, la dejadez de la municipalidad hacia sus problemas de vialidad y servicios públicos en general, la indiferencia y la indolencia. Todo esto ya ha sido planteado por periodistas como Marcos Morales en el periódico El Centinela, Antonio Ruiz en Diario de Los Andes y Rafael Cortés en Diario La Nación. "Pero fueron voces desoídas y las autoridades no hicieron caso de éstas".

"La indiferencia y la irresponsabilidad de sus munícipes -los integrantes del Concejo Municipal-, hablo de muchos años atrás; si se revisan los archivos, hay casos, a partir de los años 60, cuando comienzan los negociados políticos, la permisología y el haber hecho construcciones no adecuadas en el Centro, ejemplos que hoy día están a la vista de todos", recuerda.

No avala, por ninguna razón, cómo la cotidianidad de las personas los ha llevado a llamar las calles, lugares y espacios públicos por otros nombres, sin importarles revisar su origen y quiénes fueron en vida, sus aportes al estado y al país.

"A la avenida Francisco Javier García de Hevia la llaman la Quinta avenida, la otra, Isaías Medina Angarita, le dicen la Séptima; a la plaza María del Carmen Ramírez, la denominan plaza Los Mangos; la otra, Antonio Ríos Reyna, la conocen como la plaza Los Enanitos. Eso no puede seguir pasando, es falta de identificarse con su ciudad, con sus espacios", dice.

Fortalezas de la Villa cumpleañera

Para Rosa Luz Hernández, presidenta del Archivo Regional del Folklore del estado, San Cristóbal "es una ciudad de clima fresco y muy agradable, de hermosos paisajes naturales. Con montañas para el encuentro con la naturaleza en el majestuoso Parque Nacional Chorro del Indio, desde donde bajan las nubes y la neblina con su manto blanco a refrescar la cotidianidad urbana".

En 2011, San Cristóbal es una ciudad abierta a la inversión, de habitantes emprendedores, trabajadores, juventud que se forma en cuatro universidades y más de 25 institutos tecnológicos, en oficios puntuales para responder día a día a la jornada laboral.

"Claro, falta coordinar esta capacidad de la gente mediante planes concretos de trabajo, estimular inversiones extranjeras, abrir posibilidades a los capitales foráneos para consolidar más empresas, más fuentes de empleo y fomentar que el sancristobalense tenga más visión empresarial, comercial, de crecer como lo ha hecho la ciudad", sostiene Samir Sánchez.

Precisa que su gente es el recurso más valioso de la ciudad cumpleañera. "En su mayoría son educados, donde hay cumplimiento de la palabra empeñada", apreciación que comparte el historiador Hernández al definir a los sancristobalenses como personas de una calidad especial, integrantes de familia de espíritu cristiano, cooperadores, con amplio sentido de ayudar, de tender la mano al forastero y de dar confianza.

"No somos oligarcas, ni de sangre azul, pero ese mote de la Ciudad de la Cordialidad sí lo es, a pesar de todo", afirma.

"Somos seres humanos con un talento cultural que en los últimos años ha destacado en todas las artes; llámese música, danza, teatro, pintura, cine alternativo... Ventanas de sabiduría que llegan y entusiasman a otros para salir adelante", manifiesta Rosa Luz Hernández.

El factor comunicacional propuesto por el Procurador de Pamplona es otra fortaleza. "San Cristóbal es una ciudad con una excelente ubicación geográfica. Es el centro desde donde nos comunicamos con la capital del país por la carretera de los Llanos, por la ruta hacia los Andes salimos al estado Zulia para conectarnos con el Océano Atlántico y en el Camino de los Españoles vamos hacia Colombia por la frontera. Privilegiada ubicación geográfica", destaca Mary Rico de Azócar, directora del Museo del Táchira.

El plan rector

Escribió el actual cronista de la ciudad, J. J. Villamizar Molina, en el texto "San Cristóbal viajera de los siglos" que al momento de la fundación "Juan Maldonado hunde su báculo florido en medio del trazado que demarca la plaza mayor, la cárcel y el cabildo, y la iglesia..." territorio donde está la Catedral y la plaza que lleva su nombre.

Trazó el conquistador el primer plan de desarrollo urbanístico de la villa que aún se conserva. Es ésta la principal debilidad actual de la ciudad que en los últimos 60 años ha visto transformar sus espacios verdes en zonas habitadas por el hombre, pero como sin rumbo definido para los expertos en la materia.

Arelys Méndez, arquitecta de las nuevas generaciones, docente de la Universidad Nacional Experimental del Táchira, considera que el nuevo plan rector de la ciudad - el vigente es de la década de los 70 - sería el mejor regalo para la Villa cumpleañera, donde los planificadores trabajen para el disfrute de la ciudad por la gente que camina y no para los carros que transitan por sus calles.

Esta planada donde la ciudad creció se conserva, pero con el paso de los años las construcciones allí levantadas han sido destruidas por la misma naturaleza. Los terremotos derrumbaron las paredes de las casas de barro y techos de teja.

Su reconstrucción ha sido desmembrada por el hombre y no hay un casco histórico para mostrar al visitante, ni una ciudad vieja, tampoco restos de la Colonia como sí se aprecia en Coro, estado Falcón. Las pocas edificaciones, iconos de la ciudad cumpleañera, están dispersas.

"Es la inseguridad otro de los males de la ciudad, la violencia desatada en las calles es tema de obligatoria discusión entre familiares y vecinos que vienen o quieren venir a San Cristóbal. Cuando estoy en otra ciudad la gente pregunta mucho sobre el tema y creen que los sicarios y guerrilleros están a la vista de todos. Claro, hay miedo de ser víctima de éstos", señala Mary Rico de Azócar.

San Cristóbal está de plácemes. Suman 450 años. La solicitud del Procurador Sánchez es historia a lo largo de los siglos. Tarea que Juan Maldonado cumplió y que otros rechazan por el asesinato masivo de los pobladores de esta tierra.

"Tenemos lo necesario para ser una gran ciudad"

Para el gobernador César Pérez Vivas, San Cristóbal es la gran metrópoli del occidente venezolano
"Tenemos lo necesario para ser una gran ciudad"
Hay que rediseñar el plan de ordenación urbanística, afirma Pérez Vivas.
( Augusto Medina  Diario La Nación 26/03/2011)

Fue el 24 de octubre de 1974; llegó procedente de la ciudad del Santo Cristo de La Grita, con intenciones de ingresar en la Universidad Católica para estudiar la carrera de Derecho: "San Cristóbal era hermosísima, cubierta casi todo el tiempo de neblina, pocos carros y poca contaminación, se respiraba aire puro, lo que 'pintaba' como una futura metrópolis; es como siempre he querido ver a nuestra ciudad de La Cordialidad: la gran metrópolis del Occidente venezolano, aunque el tiempo aún, 37 años después, no nos ha dado esa dicha".

---Eran tiempos totalmente diferentes, allí había sueños y mucha esperanza, deseos de superación, hermandad, colaboración, querencia por nuestras costumbres y mucha cordialidad; hoy hay preocupación y deseos de cambios, intolerancia, indiferencia con algunos preocupados por el tinte político, sin importar que no aportan nada a San Cristóbal, algo que debemos rescatar, pensando en cómo éramos antes.

Quizás, ese jaureguino que pensó en una mejor ciudad pronta a cumplir 450 años, no se imaginó que sería precisamente él, como gobernador, quien pudiera encaminarla a que ese sueño algún día se haga realidad, "porque aquí lo tenemos todo, buen clima, gente trabajadora, recursos naturales y, lo más importante, el don de Dios, que nos ubicó en el punto donde comienza la Patria".

César Alejandro Pérez Vivas llegó bien temprano a su oficina -como todos los días- en la Residencia de Gobernadores, donde dijo que luego de hacer ejercicio, subiendo la montaña, se dedica a atender los asuntos oficiales como gobernador y recibe a mucha gente previa cita, "a veces salimos de aquí a las 12 de la noche y sobre las cinco de la mañana hay que estar, nuevamente, preparándonos para la siguiente jornada".

---Realmente, a mí me gustaría ver a San Cristóbal con una población que se integre de manera ordenada, eficiente con las ciudades periféricas donde pueda mantener la adecuada calidad de vida, mejorando los servicios de infraestructura; por ello, como gobernador tenemos una serie de proyectos que buscan integrar físicamente su área metropolitana, su movilidad interna, y organizar nuevos asentamientos, donde las familias que se han ubicado en las colinas orientales puedan encontrar un lugar seguro para vivir, y recuperar esas áreas de arcillas expansivas para convertirlas en bosques naturales, para preservar el clima y la temperatura.

La mañana, como ha sido estos últimos días, ha estado lluviosa, similar a la que observó en octubre del 74 el hoy mandatario regional, quien quiso salir de su despacho para hablar a cielo abierto, escogiendo el frente de la Residencia de Gobernadores, desde donde se divisaba Barrancas y la zona de El Mirador, y hacia allá extendió su mirada (...) "allí hay que frenar las áreas protegidas, rediseñando el plan de ordenación urbanística de San Cristóbal y el plan de ordenación del territorio del área central del Táchira, que permita el crecimiento ordenado para los próximos 100 años, para superar lo que se ha hecho en estos 450 años".

---Este clima me hace recordar mucho aquella ciudad pequeña, cuando llegamos de La Grita. En San Cristóbal de esa época no había hechos de violencia, no ocurrían eventos criminales permanentes, por eso, ahora debemos recuperar la paz, la calidad de vida con espacios para la educación y cultura, quiero construir un gran teatro, ese que nunca tuvimos quienes vinimos a estudiar aquí; debemos recuperar un centro de convenciones para eventos nacionales e internacionales.

"Hoy en día, tenemos que ayudar a San Cristóbal con las complementaciones necesarias, como es el hecho de poder contar con un buen y seguro aeropuerto, actualmente dependemos mucho de un galpón llamado aeropuerto de Santo Domingo y eso debe ser una terminal moderna que convierta a San Cristóbal en una verdadera ciudad metropolitana".

Sacó su mano por el balcón del frente de la residencia para sentir que estaba lloviendo y que la temperatura ya andaba por los 18 grados, "así era 37 años atrás San Cristóbal, todo el día uno tenía que estar bien protegido, porque el intenso frío y la permanente llovizna con neblina no cesaban; hasta eso se lo hemos quitado a la ciudad por la contaminación ambiental, debido al sistema vehicular y transporte colectivo, hecho que no debe pasar desapercibido".

---Yo creo que se requiere mejorar la infraestructura de servicios, carreteras en buen estado que comuniquen a San Cristóbal con su periferia. Necesita la ciudad un sistema de transporte masivo y garantizar un flujo de agua potable, pero, para ello, debemos preservar las cuencas hidrográficas y sería fundamental terminar los grandes proyectos hidroeléctricos, pues lleva 12 años paralizada La Vueltosa.

Volvió a mirar hacia el centro de la ciudad para afirmar que: "San Cristóbal es una ciudad de futuro, así como lo percibimos cuando soñamos con ser abogado de la República, aunque ahora, 37 años más tarde, sea el gobernador del Táchira".

Insistió en que la gran potencialidad de San Cristóbal es ser la "Ciudad de Venezuela, porque lo tenemos todo, al lado tenemos a nuestros vecinos de Colombia, y si vemos nuestra ciudad como la metrópolis que sirve de entrada y salida a la Comunidad Andina de Naciones, el futuro será mejor".

---Porque la ventaja que tenemos es que quien viene a San Cristóbal no se quiere ir porque aquí hay gente amable, educada, con un clima y ambiente especial, una ubicación geográfica envidiable en América el Sur.

Confiesa que quizás si algún amigo en la universidad, a finales de los 70, a punto de graduarse, le hubiese preguntado si quería ser gobernador, no hubiese tenido respuesta concreta, "porque yo lo que quería era ser abogado, después con el transcurrir del tiempo nos fuimos integrando a la política -siempre en Copei-, y allí sí nació la idea de servirle al pueblo, como se hace ahora, porque un día de trabajo del gobernador es de servicio para nuestra gente, creo que soñé con dirigir al Táchira para velar por el pueblo, que es lo que actualmente hago".

Dijo que en esta época, la desesperación de la gente en San Cristóbal, en el Táchira y en toda Venezuela, es el desempleo, la inseguridad, la vivienda y los temas de salud, lamentablemente, me ha tocado ser gobernador en una época muy dura, porque tenemos un cerco económico y saboteo, incluso de gente que vive aquí, que debería ayudar, pero hacen lo posible para que no salgan los proyectos.

"Si a mí me tocara decirle a los sancristobalenses qué hacer, les diría que no ensuciaran la ciudad, porque si cada persona contribuye a que el frente de su vivienda esté limpio, ya tendríamos una contribución para embellecer a San Cristóbal que tanto lo necesita, porque antes era lo que nos enseñaban nuestros padres y así era esta bella tierra, todo el mundo ayudaba, colaboraba, y había mucha armonía entre la población, era una familia, donde lo fundamental era hacer algún aporte por muy pequeño que fuera, para mantener la Villa en buen estado; ahora uno ve que se toman un café y desde un vehículo lanzan el vaso a la calle".

---Se nos ha ido perdiendo la tolerancia, la amabilidad y cordialidad de hace 30 ó 40 años atrás, era nuestra principal característica; aportes de San Cristóbal a la vida cultural de Venezuela: su gente, pero los tiempos van cambiando, acabando con esas costumbres, pareciera que con el pasar del tiempo, hasta de ese atractivo natural de ver una ciudad llena de neblina durante todo el día se lo hemos ido arrancando, porque no hay preocupación por la contaminación ambiental.

Pérez Vivas recuerda a los jóvenes de esta generación, que 450 años tiene todavía San Cristóbal como una ciudad joven, que no ha visto nacer sus principales obras y que es el momento para que los sueños de cada sancristobalense se hagan realidad, aportando cada uno su granito de arena en la conservación de los cimientos de esta urbe, que debe convertirse en la gran metrópolis del Occidente venezolano, "porque futuro tenemos, si nos lo proponemos".

450 años de historia << Alejo García S. >>

Martes 29/03/2011

450 años de historia << Alejo García S. >>

En atención a la petición del Cabildo de Pamplona ante la Audiencia de Santa Fe de Bogotá, para solicitar la licencia con la finalidad de fundar una Villeta en el territorio del Valle de las Auyamas o Valle de Santiago, situada entre la ciudad proponente y Mérida en la geografía venezolana. El encargado de hacer la solicitud fue el vecino y Regidor Juan del Rincón, quien presentó ante la instancia colonial un auto con fecha 12 de agosto de 1560, indicando la existencia de un valle y unas cuantas comarcas integradas por numerosos indígenas. La nueva villeta quedaba dependiendo de Pamplona. Para llevar a cabo la fundación encargaron al capital español Juan Maldonado y Ordóñez de Villaquirán. Luego de un proceso de evaluación de las informaciones presentadas por el solicitante y oídos los testigos, el tribunal dictó la Carta y Provisión Real para autorizar la fundación de la futura ciudad de San Cristóbal. La aparición de esta Villa trajo a colación varios hechos importantes a saber: nombramiento de cuatro regidores y no ocho como era la costumbre, la naciente población era independiente de Pamplona. Esta posición es considerada por algunos historiadores como la primera muestra de soberanía territorial de la venidera Capitanía General de Venezuela. Al margen de estos inconvenientes, la Villa de San Cristóbal se fundó el 31 de marzo de 1561, en el sitio que hoy ocupa la plaza que lleva por nombre la del fundador.

En su vasta historia de 450 años la ciudad de San Cristóbal ha sido protagonista de innumerables acontecimientos de índole económico, políticos, sociales, culturales... En lo económico tuvo el privilegio de contar en el pasado con la venida de muchos emigrantes europeos que instalaron pequeñas empresas (café, cacao...). En lo político San Cristóbal ha sido protagonista de primera. En 1781 dio apoyo al movimiento comunero procedente de El Socorro (Nueva Granada). Fue valuarte en el proceso emancipador. El 28 de octubre de 1810 la clase política de la villa firmó el acta de la independencia en adhesión a los sucesos del 19 de abril de 1810. Durante el recorrido de la Campaña Admirable comandada por Simón Bolívar en 1813, le dio alojamiento a él y a sus tropas. En 1820 lo tuvo de huésped por varios meses y fue asiento temporal del gobierno de la Gran Colombia. Desde aquí El Libertador trazó las estrategias para la firma del armisticio y el tratado por la regularización de la guerra, firmados en Trujillo por Pablo Morillo y Simón Bolívar el 27 de noviembre de 1820. Asimismo, se hicieron los preparativos para la batalla de Carabobo. Entre los personajes políticos nacidos en San Cristóbal tenemos: Juan Pablo Peñalosa, Pedro María Morantes, el general Rafael Nogales Méndez (un tachirense universal), Isaías Medina Angarita, entre otros.

Destacan en lo cultural y artístico: Marco Antonio Rivera Useche (músico), Miguel Ángel Espinel (músico y docente), Manuel Felipe Rugeles (poeta y periodista), Luis Felipe Ramón y Rivera (músico y compositor), Chucho Corrales (músico, compositor y cantante), Manuel Osorio Velasco y tantos otros preclaros sancristobalenses.

Además, la ciudad de la cordialidad ha tenido una pléyade de otros pintores, escultores, poetas, y así como incontables profesionales de la arquitectura, ingeniería, médicos, abogados, economistas, educadores y demás afines de gran valía. Amén, de contar con centenares de universitarios trabajando en el exterior y poniendo en alto el gentilicio tachirense.

La urbe que pudo ser un ejemplo de desarrollo demuestra todo lo contrario. Su vialidad es un desastre y su urbanismo. Crece la construcción, mientras las vías de comunicación son las mismas de hace mas de 20 años. Por eso San Cristóbal ha tenido un crecimiento desordenado y anárquico. Marcha cada vez más desorientada, sin brújula ni previsiones futuristas. La columna vertebral de su desarrollo urbanístico está desactualizada. La ordenanza de zonificación o su plan de adelanto urbano data desde 1976. Con tibias modificaciones. Prácticamente tiene más de 20 años de mora con la transformación de San Cristóbal.


Cuna de la alegría... << S.B.C >>

Lunes 28/03/2011  Cronísticas - Cuna de la alegría... << S.B.C >>

En el albor histórico de los 450 años de la Villa, volverán a vibrar las estrofas alegres de su inmortal pasodoble. Aunque quizás pocos recuerden su amor y entrega por San Cristóbal galana donde nació y ofrendó su inspiración y talento musical. Pero en cada acorde, en cada arpegio de su composición, resurgirá su consagración y entrega a la tierra que le dedicó sus versos y canciones. Jesús Manuel Corrales Sánchez, nuestro Chucho Corrales inolvidable, cantor y poeta de la urbe en declives al Torbes. Cordial, campechano, no sólo fue excelente guitarrista, cantante, compositor y locutor, sino uno de los impulsores y fundadores de la Sociedad de autores compositores de Venezuela (Sacven). Destacó artísticamente a nivel nacional como cantante en las en las orquestas de Luis Alfonso Larraín, Billo's Caracas Boys, Jesús Sanoja y Aldemaro Romero. También incursionó fugazmente en la política y electo senador más por su fama y popularidad antes que su actividad partidista. No obstante, murió en desamparo oficialista en el Hospital Central en 1998, víctima de una infección bacteriana. Nunca, sin embargo, se olvidarán sus bambucos, boleros y menos su “San Cristóbal andina”, el pasodoble lema de la Feria internacional de San Sebastián y segundo himno del Táchira. En recuerdo póstumo a su obra y en homenaje a la ciudad de sus desvelos, volveremos a entonar con entusiasmo
San Cristóbal andina/eres la cuna de la alegría y la tradición

San Cristóbal tus ferias es la pionera, la más castiza de mi nación tus mujeres hermosas, ojos de hechizos, porte de reina y rítmico andar San Cristóbal lo juro, quien te conozca más nunca te podrá olvidar.

Rasgos de la Ciudad << José de la Cruz García Mora (*) >>

Sabado 26/03/2011 Pregones
Rasgos de la Ciudad << José de la Cruz García Mora (*) >>

Alguna vez escuchamos en boca del señor cronista de El Cobre, don Eliseo Zambrano, que toda ciudad o pueblo "tiene una historia, un santo y un río". Es muy acertada la interpretación del ilustre caballero, al precisar puntos esenciales en el proceso de poblamiento de la región o el país. La historia es el resultado de la dinámica propia de los conglomerados humanos, en cuyo seno se juntan las condiciones del entorno y las aspiraciones del colectivo, yuxtapuestas en cada una de las épocas. Pero el santo y el río están relacionados con los pilares de identidad impuestos por la cultura hispánica durante la larga jornada colonizadora. La función del santo no era otra que domesticar el espíritu y asegurar el control ideológico y doctrinario de los naturales, bajo premisas de evangelización o sumisión a los nuevos valores religiosos. El papel del río, en cambio, traduce la vitalidad de la dinámica interna de la ciudad, en la relación umbilical con el entorno geográfico y en la estructuración el tejido social de los conglomerados.

Seguramente otros articulistas asuman la apología de la influencia de San Sebastián y otros santos en el devenir histórico de la ciudad cumpleañera.
Diversas individualidades también se han ocupado en describir y analizar los episodios más resaltantes de San Cristóbal en estos 450 años de historia. Por ahora, interesa destacar algunos rasgos geográficos existentes entre el valle del Torbes y el núcleo urbanístico de mayor peso demográfico en la región. La villa de Juan Maldonado se fundó sobre acumulaciones aluviales pleistocénicas. La expresión topográfica se conoce popularmente como mesetas o terrazas 'disectadas' por las quebradas La Bermeja y La Parada. El emplazamiento inicial permitió el desarrollo de la planta urbana en forma de damero, cuya morfología respondía a la clásica estructura española de manzanas cuadriculadas. La evolución de la ciudad ha llevado a la compleja coalescencia de sitios o emplazamientos, algunos de los cuales se caracterizan por la vulnerabilidad ecológica frente a eventuales riesgos naturales.

La disposición geográfica del valle del Torbes fue uno de los factores físicos que vigorizó el papel funcional de San Cristóbal, como modo de convergencia o divergencia de caminos. La ciudad se ubicó exactamente en el lugar donde el valle se amplía y entran en contacto los paisajes 'colinosos' y ondulados de la Depresión del Táchira y la frontera con el amasijo de cerros de la cordillera andina. Además, la arteria hídrica sirvió como un corredor vial para desafiar las dificultades orográficas y las profundas gargantas del páramo El Zumbador, en cuyas cabeceras los abras y portachuelos permitían el acceso hacia los valles intra e intermontanos de La Grita y Mérida. Pero el flujo hídrico también abría una ventana hacia el piedemonte y los llanos. Incluso, era fácil vencer las modestas serranías y conectar con las planicies del sur del Lago. No se sabe si Juan Maldonado tenía nociones de relaciones geoestratégicas, pero fundó un núcleo poblacional destinado a crecer progresivamente con el constante fluir de las comunicaciones.

(*) Geógrafo



sábado, 19 de marzo de 2011

Dinamismo geohistórico de la ciudad << José de la Cruz García Mora >>

"Una ciudad -como escribió alguna vez el historiador tachirense Aurelio Ferrero Tamayo - es una conquista humana y el resultado de pequeños esfuerzos cotidianos contra la barbarie". El proceso de transformación en las estructuras urbanas, económicas, sociales y humanísticas de San Cristóbal, en estas cuatro centurias y media, traduce con gran exactitud geohistórica el tránsito desde la organización más simple, como villorrio de españoles, a la complejidad funcional de la actualidad, como núcleo metropolitano regional. Es la yuxtaposición de procesos y factores que alientan el dinamismo urbano de la capital del Estado y le confieren la dimensión como encrucijada de caminos y esperanzas. El peso de San Cristóbal se deja sentir con intensidad telúrica en la estructuración terrígena del territorio tachirense. Incluso, la influencia se proyecta más allá de las fronteras regionales.
Tal es el papel que le ha correspondido jugar a la Villa fundada por Juan Maldonado y construida con pasión terrígena por los ciudadanos de todas las épocas.
Allá lejos en el tiempo se ubican los inicios en el proceso de articulación espacial de la red de asentamientos del Táchira, jalonados por la presencia de la villa torbesina, con un primer manojo de pueblos que comenzaron a palpitar con entusiasmo en el valle del Torbes o en los alrededores: Táriba, Capacho, Lobatera y Palmira. Tiempo después vendría Cordero. Para entonces era necesario articular la conexión entre los valles del Táchira, Torbes, El Valle y Grita, para asegurar el intercambio entre Pamplona y Mérida. San Cristóbal, ubicada en la mitad del trayecto, logró consolidar su funcionalidad como centro de convergencia de caminos, al facilitar el acceso hacia la frontera, el llano, el sur del lago y el vientre profundo de la cordillera andina. Con la aparición de San Antonio, Rubio, Michelena, Colón, Seboruco y El Cobre, logra estructurarse una subregión muy dinámica en los recintos de la depresión del Táchira. Otro manojo de pueblos palpita en la órbita económica de La Grita, la cabecera de la otra subregión geográfica del Táchira.
Acá cerca en el tiempo la complejidad funcional de la capital del Estado logra articular los espacios e integrar la dinámica metropolitana, en cuyo seno un gran conglomerado de almas centra el quehacer cotidiano en las perspectivas socioeconómicas de la región. El efecto magnetizante de San Cristóbal, como primer centro urbano de la región andina, estimula el intercambio humano y comercial con otras ciudades y pueblos. Cada día se genera una serie de movimientos pendulares que tienen en San Cristóbal el centro o el destino de la gran masa laboral en movimiento. La intensidad de la integración binacional muestra a San Cristóbal como referencia espacial frente a la presencia de Cúcuta al otro lado de la frontera, como San Antonio, Rubio y Ureña como bisagras funcionales de esa dinámica geoeconómica y social. La ciudad cumpleañera aún sigue entretejiendo vínculos de pasión humana, no sólo con respecto al espacio, sino también en función del tiempo, porque sigue siendo un hito en la configuración geohistórica del Táchira. Geógrafo.
josegarmo@yahoo.com

Archivo digital del Táchira << J. Pascual Mora García >>


En el marco del evento el día 28 de marzo a las 6:30 pm se inaugurará la sala del Proyecto Archivo Digital del Táchira “Mons. Carlos Sánchez Espejo”, en la planta baja del Edificio D en la Ula-Táchira. El mismo fue aprobado por el Consejo de Núcleo de la Universidad de Los Andes Táchira “Dr. Pedro Rincón Gutiérrez” (Dic-2010), y cuenta con apoyo del Gobierno del estado Táchira, Decreto 335. Esta propuesta es una iniciativa que nace del Grupo de Historia de la Educación Hedure y se entronca con el proyecto entre el Centro Manes-Uned y el Departamento de Pedagogía de la Ula-Táchira. En principio está planteado un trabajo que retome las dos vertientes adscritas al Centro Manes del Departamento de Historia de la Educación y Educación Comparada de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned), en Madrid. El Proyecto Manes-Ula-Táchira fue aprobado por el Departamento de Pedagogía con fecha 18/04/2005. Con este esfuerzo buscamos insertarnos en el Programa Memoria del Mundo de la Unesco, por eso entre sus objetivos se busca determinar las mejores prácticas para la preservación del patrimonio digital, y la manera de aplicarlas usando las directrices de la Unesco aprobadas en la 32 Conferencia General de la Organización. El Comité Regional para América Latina y el Caribe del Programa Memoria del Mundo de la Unesco (Cralc) es la instancia que propicia el registro de la historia en general, ya que la digitalización no sólo tiene que ver con la información que se produce hoy, sino que abarca también documentos antiguos que se quieran transferir a formatos electromagnéticos para facilitar su consulta. En este sentido, los libros y en general los documentos antiguos con un valor histórico y Patrimonio Nacional, podrán ser puestos al servicio del público gracias a la digitalización; he aquí la opción para la difusión de estos contenidos. Igualmente, el proyecto Archivo Digital del Táchira es el resultado de un conjunto de archivos digitalizados y microfilmados de distinta procedencia, como resultado de nuestras visitas académicas a los archivos, centros de documentación y universidades de Iberoamérica; el cual será alimentado por los programas de maestría y doctorado en historia próximos a instalarse. El evento se inicia con el programa de Diplomado en Historia Comparada de la región fronteriza colombo-venezolana.